El Poder Invisible

No sé si conoces mi historia, pero hace algunos años, un problema de salud que puso en riesgo mi vida, se convirtió en la situación clave donde descubrí el Poder de la Consciencia para sanar el cuerpo, y que cada día es una nueva oportunidad para diseñar la vida que realmente deseamos.

Más allá de practicar meditación y leer sobre desarrollo personal desde los nueve años, nunca lo había experimentado de esa manera. Sucedió en el marco de dos operaciones complejas y días de terapia intensiva, durante los que prácticamente no podía hablar ni moverme de la cama. Los médicos me explicaron que las operaciones fueron exitosas porque era joven, tenía buen estado físico, y eso ayudó a que el cuerpo resistiera.

Sinceramente, hubo noches en que no quería dormir, porque no sabía si despertaría en la mañana. Si, despertar en la mañana y que mi cuerpo sanara lo más rápido posible, era mi mayor meta y aspiración en ese momento.

Fue entonces cuando comprendí que cada día es un regalo, una nueva oportunidad, y que el hecho de abrir los ojos y sentir los rayos del sol sobre la cara, es una gran razón para sentirme agradecido. Agradecido porque la vida me sostiene y te sostiene. La vida hace que mientras duermes por la noche, tu corazón siga latiendo, y sigas respirando. La vida te despierta cada mañana y te dice ¨¡arriba, estás vivo!¨; y si hoy abriste los ojos por la mañana, existe una razón por la que estás aquí. La vida te sostiene y el alma te impulsa a crear una experiencia extraordinaria.

También aprendí algo muy importante: Que era responsable de lo que sucedía, y tenía el Poder de transformar el problema en una lección valiosa. Sanarme mucho más rápido, encontrando una solución de adentro hacia afuera, tomando consciencia del patrón emocional y energético que lo causaba todo; y enfocar mi atención en imaginarme sano, saliendo del hospital radiante, dispuesto a hacer todo lo que debía hacer para ordenar mi vida ¿Y sabes qué? Fue una tremenda sorpresa para los médicos ver como mi organismo se revitalizaba tan rápido, y en tan sólo 8 días salía caminando del hospital feliz, sonriendo y saludando a todo el mundo.

Actualmente, la neurociencia y la física cuántica han probado una verdad milenaria. Todo es energía, y el Poder de la Consciencia, nuestro poder invisible, puede acelerar los procesos de curación de cualquier síntoma del cuerpo, y resolver conflictos en todo aspecto. Si, un problema no puede resolverse con el mismo nivel de consciencia que se fabricó, la solución siempre está en un nivel mayor. Es por eso que, si aprendes a entrenar tus emociones, aprendes a elevar tu energía, en cualquier momento del día, en toda situación, para deshacer el miedo y tomar decisiones de una manera más efectiva. 

 

Agustin Andrade

Autor y Comunicador

www.agustinandrade.com

Extraido de www.institutodraco.com

Post a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

*