Ser Abuela: el Postre de la Vida

Estoy segura de que la mayor parte de las mujeres que se ha convertido en abuela,  coincidirá conmigo  en que es una experiencia maravillosa. Una amiga resume esta vivencia  como ”el postre de la vida”  Me encanta esta definición porque creo que describe perfectamente el sentimiento de plenitud y alegría que experimentamos con nuestros nietos.

No obstante esta experiencia no solo nos trae alegría a los adultos. También nos trae enormes beneficios para nuestra salud física y mental.  En  efecto, varios estudios coinciden en señalar que el hecho de ser abuelos mejora nuestro ánimo , nos hace mas ágiles,  favorece nuestra salud física y además retarda el deterioro mental propio de la vejez.  Es que el hecho es que en una sociedad como la de hoy, en la que cada vez más veces padre y madre trabajan fuera del hogar, la ciencia ha observado que los abuelos que tienen una estrecha relación con sus nietos suelen padecer menos depresiones.  (Estudio del Instituto sobre el Envejecimiento de la Universidad de Boston, presentado en la 108 reunión anual de la Asociación Americana de Sociología 2013). En este estudio,  los expertos estudiaron a 376 abuelos de unos 77 años y 340 nietos de 31 años.

Sin embargo, no sólo son los adultos los beneficiados en esta relación. Los resultados de la investigación, asimismo, han mostrado que los nietos también se benefician psicológicamente de la relación con sus abuelos, influyéndoles en su bienestar psicológico hasta bien entrada la edad adulta.   Esto se explica porque los niños que pasan tiempo con su abuelos,  extienden sus redes de apoyo,  se vinculan con otras generaciones,  aprenden cosas nuevas y además en la mayoría de los casos tienen una relación casi exclusiva con el abuelo o la abuela, la  que esta mas centrada en el juego y en la conversación que en las normas y reglas que muchas veces deben ser impuestas por los padres al interior de la familia nuclear.  Los investigadores han denominado a este tipo de relación “apoyo tangible” o solidaridad funcional o instrumental. En este sentido, se cumpliría aquél dicho de la sabiduría popular de “es mejor dar que recibir”, como comentan los científicos que han participado en la investigación. Es por estas razones que los investigadores creen que los esfuerzos por fortalecer a las familias no deberían centrarse  tan sólo en la familia nuclear o en aquellas con niños pequeños. Al contrario, deberían ampliarse a los roles de abuelos y nietos, porque estas relaciones también tienen funciones importantes durante  la niñez y también en la edad adulta.

En esta época compleja en la cual vivimos como sociedad en la que muchas veces sentimos que la importancia de la familia esta desvalorizada y fragilizada, disfrutemos  de este rol de abuelos en la convicción de que no sólo nos trae alegrías y satisfacciones, mejorando  nuestro estado de salud, sino que también colabora en la formación de  niños sanos y felices que se convertirán mas adelante en adultos autónomos y socialmente aptos. Disfrutemos este maravilloso postre que nos regala la vida.

 

 

Macarena Urenda Salamanca

 

Post a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *

*