“Un reciente estudio realizado por el Foro Económico Mundial asegura que el 65% de los niños que está actualmente ingresando a la escuela primaria, cuando se gradúe, terminará trabajando en algo que no existe en la actualidad.”
El reciente estudio de tendencias globales en capital humano, realizado por Deloitte en más de 10.000 empresas alrededor del mundo, nos revela que uno de los principales impactos que la tecnología tendrá en el mundo laboral es la transformación de los puestos de trabajo, de la forma como la conocemos en la actualidad.
El 80% de los encuestados espera que el uso de la Inteligencia Artificial, las tecnologías cognitivas y la robótica para la automatización de procesos, se incremente significativamente en los próximos 3 años. Sin embargo, no hay una visión necesariamente apocalíptica respecto de lo que sucederá con las plazas de trabajo en este futuro tan cercano, ya que apenas el 13% considera que esta automatización eliminará cargos y empleos.
Sin caer en una posición ingenua, la realidad es que muchos de los trabajos, tal como los conocemos en la actualidad, se transformarán profundamente. Los empleos de los próximos años serán digitales, basados en datos y multidisciplinarios.
Incluso un reciente estudio realizado por el Foro Económico Mundial asegura que el 65% de los niños que están actualmente ingresando a la escuela primaria, cuando se gradúen, terminarán trabajando en algo que no existe en la actualidad.
Los trabajos del futuro requerirán más capacidad para la resolución de problemas, habilidades de comunicación, facilidad para interpretar datos, empatía y servicio al cliente. Como podemos observar, es una mezcla muy interesante de competencias técnicas y capacidades personales, que los jóvenes deberían orientarse a desarrollar. Y las universidades, de alguna manera incorporarlas en sus programas académicos para estar a la vanguardia.
Un aspecto interesante de este cambio en la realidad laboral es que al automatizarse las tareas repetitivas que se han venido realizando en muchos puestos de trabajo, existirá más disponibilidad de tiempo, el cual deberá ser utilizado y canalizado hacia las actividades que realmente crean valor, lo cual repotenciará el rol de muchos cargos en las organizaciones.
Es así como en los últimos quince años han surgido nuevos trabajos que no existían antes, entre los principales: social media manager, científico de datos, productor de podcasts, diseñador de experiencias, arquitecto de cloud, desarrollador de red móvil, embajador de marcas online, mercadólogo de contenidos, etc. ¿Qué nos deparan los próximos años? ¿Cómo debe ser la interconexión entre la academia y el sector empresarial para tomar constantemente el pulso de las necesidades de este último y así renovar las mallas curriculares?
Por ejemplo, hay menos de 10.000 especialistas en inteligencia artificial en todo el mundo. Enormes oportunidades se abren en ese campo. ¿Nuestros jóvenes están apuntando en esa dirección? ¿O nos seguimos llenando de profesionales que fácilmente pueden ser reemplazados por mecanismos automatizados como indicábamos inicialmente?
Los “supertrabajos” combinarán lo mejor de la tecnología con las fortalezas humanas de las personas, partiendo de la base que existen características innatas al ser humano que la tecnología aún no puede reemplazar. Entonces, todos —y no únicamente las nuevas generaciones— debemos tener en cuenta estos puntos de referencia para mantenernos vigentes en el mundo laboral de los nuevos “supertrabajos”.
Autor: Roberto Estrada Vallejo
Extraido de Revista Perspectiva