Con la belleza y emotividad que caracteriza a la sociedad Disney Pixar, esta película nos da la posibilidad de hablar de temas tan complejos como la muerte, la pertenencia a la familia y la pasión en nuestras vidas. Hablar de estos temas en familia no es común, sin embargo, son estas conversaciones las que nos conectan emocionalmente en niveles sorprendentes, generando vínculos profundos que inciden positivamente a lo largo de nuestras vidas.
Esta es la historia de cuatro generaciones de una familia en México, en la que por un evento traumático del pasado la música está prohibida. Pero para Miguel, el tataranieto protagonista de esta película, la música es su pasión, un torrente que desde el comienzo anticipamos va a desbordar por algún lado. Tratando de encontrar la forma de poder desarrollar esta pasión, durante las celebración del día de los muertos, llega al mundo de éstos a encontrarse con sus antepasados y descubrir de dónde viene su amor por la música.
La muerte es una realidad ante la cual todos, grandes y chicos, nos sentimos vulnerables por la incertidumbre que conlleva. Aún para quienes son creyentes, siempre existe la pregunta sin respuesta: ¿qué hay en el más allá?
¿Y por qué es importante hablar de este tema con los hijos? Porque los niños también se hacen las preguntas fundamentales de la vida. No es necesario que demos respuesta y certezas absolutas, porque en este tema no las hay. La invitación es a reflexionar juntos, escucharlos y abrirnos en el plano de las emociones. Creo que los niños nos sorprenderán con sus respuestas. Hablar de la muerte es importante porque cuando tenemos conciencia de ella nuestra vida puede ser diferente. Valorar y cuidar más lo que tenemos, a quienes nos quieren, los amigos y nuestros talentos.
Pero hay otra arista de este tema de la muerte que es muy interesante también: ¿qué dejamos en este mundo cuando nos morimos?
Lo que podemos rescatar de esta historia es que nuestra huella es el amor, los vínculos que fuimos capaces de crear y que permanecerán en la memoria de nuestros hijos, nietos, bisnietos…y mientras más amor haya habido en nuestras vidas más generaciones serán tocadas por este.
Esta energía o realidad que es el amor que se comparte en los vínculos significativos, es también la principal fuente de felicidad. Así lo ha demostrado el estudio longitudinal más extenso en duración que se haya hecho: The Adult Development Study, por la Universidad de Harvard. Los resultados hasta ahora indican que las personas más felices son aquellas que logran desarrollar relaciones interpersonales sanas y profundas, logrando transmitir un cierto estilo, podríamos decir, de vincularse que puede impactar a varias generaciones. No se trata de que no haya conflictos ni dificultades en la vida y en nuestras relaciones. En Coco vemos estas tensiones en Miguel, quien se siente “diferente” a todos los de su prole por su deseo de ser músico. Y vemos también una familia, especialmente la abuela, con una herida abierta que se muestra en el odio a la música.
Todos pertenecemos a una familia y tenemos una historia común que nos define. ¿Qué tipo de familia tengo? ¿Cuáles son los eventos traumáticos que nos atraviesan? ¿Qué nos une o nos divide? ¿Cómo queremos seguir construyendo nuestra historia?
El viaje de Miguel al mundo de los muertos es un recorrido por las historias y personajes que dieron origen a esta familia y que le permite resignificar esos eventos dolorosos que no logra comprender en el presente. Es una linda imagen para decirnos que la memoria y el recuerdo, las historias compartidas en familia, pueden ayudarnos a entender y sobreponernos a las dificultades que hayamos tenido.
Al ver esta película estoy segura de que te conectarás con algún abuelo o abuela, con tus padres o reflexionarás en cómo quieres ser recordado por tus seres queridos.
Aquí van algunas preguntas y frases para iniciar una conversación con los hijos:
¿Qué crees qué hay más allá de la muerte?
¿Cómo te gustaría ser recordado por todos los que te quieren?
¿Qué cosas te gustan de tu familia?
¿Qué cosas no te gustan?
¿Hay algo que quieras con todo el corazón?
¿Qué crees que será un buen recuerdo para cuando seas grande?
Lo que más recuerdo de mi abuela o abuelo es…
Lo que más me gusta de mi familia es…
Cuando me muera me gustaría que me recordaras por…
Yo creo que cuando morimos vamos a….
Lo más doloroso que viví cuando era chica fue…
Mi recuerdo más feliz de la infancia es…
Recuérdame es el título de la canción principal de Coco, de un padre que le pide a su hija y a su familia que nunca olviden cuánto los amó. El amor es lo que quedará de nosotros al final, pero el amor es también lo más valioso que podemos dar a nuestros hijos para su futuro.