Como la Nutrición Influye en el Cáncer

  • El cáncer no es una enfermedad genética nuclear, pero se produce como resultado del previo daño mitocondrial, lo que posteriormente desencadena las mutaciones genéticas nucleares que pueden causar el cáncer
  • La función mitocondrial puede mejorarse significativamente a través de la alimentación. La clave es comer cantidades más elevadas de grasas saludables y bajas cantidades de carbohidratos netos, además de cantidades moderadas de proteína de alta calidad
  • Las células normales y saludables tienen la flexibilidad metabólica de reemplazar el uso de glucosa por el uso de cuerpos cetónicos. Las células cancerosas carecen de esta capacidad, así que cuando reduce los carbohidratos netos (carbohidratos menos fibra total), mata de manera eficaz al cáncer

Por el Dr. Mercola

¿Sera posible que el daño cromosómico sea un simple marcador del cáncer y no la causa real de la enfermedad? La evidencia convincente sugiere que este es el caso, y en la literatura presentada, el cirujano ortopédico Dr. Gary Fettke revisa algunas de estas pruebas.

Al haber sido víctima del cáncer, Fettke se dio cuenta de cómo la nutrición influye en el cáncer, y la importancia de llevar una alimentación alta en grasas saludables y bajas en carbohidratos netos (carbohidratos totales menos  fibra, es decir carbohidratos sin fibra).

Fettke no es el único que promueve el modelo metabólico de cáncer.

A principios de este año entrevisté a Travis Christofferson, autor de un libro fenomenal llamado «Tripping Over the Truth: En este tema «El Regreso a la Teoría Metabólica del Cáncer, Muestra un Nuevo y Positivo Camino para la Cura», en este tema.

El Modelo Metabólico del Cáncer

El proyecto Cáncer Genoma Atlas, que comenzó en 2006 se propuso secuenciar los genomas de las células cancerosas.

Fue el mayor proyecto del gobierno jamás concebido, que involucró 10 000 veces la cantidad de secuenciación genética realizado por el Human Genome Project. Por desgracia, los resultados no cumplieron con las expectativas originales.

La evidencia claramente demostró que algo más que una simple mutación genética estaba en juego. Las mutaciones encontradas en las células cancerosas simplemente eran demasiado aleatorias. Algunos tipos de cáncer ni siquiera tenían mutaciones genéticas que los impulsaran.

Entonces, ¿cuál podría ser el factor determinante?

En pocas palabras, comúnmente se pensaba que los defectos genéticos nucleares eran responsables del cáncer que en realidad se generaba con la corriente. El daño mitocondrial se presenta primero, lo que a su vez desencadena las  mutaciones genéticas nucleares que podrían causar el cáncer.

Por otra parte, los científicos ahora están descubriendo que la disfunción mitocondrial es el origen de prácticamente todas las enfermedades, lo que clasifica a la función mitocondrial como el centro de casi cualquier programa de prevención de enfermedades y bienestar.

Como lo indica Fettke, una de las principales consideraciones es el metabolismo de la glucosa dentro de su mitocondria–una teoría inicialmente presentada por el Dr. Otto Warburg en la década de 1920.

En 1931, Warburg ganó el Premio Nobel de Fisiología o Medicina por su descubrimiento de que las células cancerosas tienen un metabolismo energético fundamentalmente diferente en comparación con las células sanas. Como resultado, las células cancerosas no tienen la misma flexibilidad metabólica como las sanas.

Las Células Cancerosas Están Metabólicamente Limitadas a Comer Azúcar

Una célula puede producir energía ya sea aeróbicamente, en la mitocondria, o anaeróbicamente, en el citoplasma. El metabolismo anaeróbico genera niveles excesivos de ácido láctico, que pueden ser tóxicos.

Warburg descubrió que en presencia de oxígeno, las células cancerosas producen ácido láctico en cantidades excesivas, y esto se dio a conocer como el Efecto Warburg.

Entonces, ¿qué es lo que esto no dice  acerca de los orígenes nutricionales del cáncer? En pocas palabras, las conclusiones de Warburg nos dicen que el azúcar «alimenta» al cáncer mientras que las grasas «lo matan de hambre».

Las células sanas pueden utilizar ya sea glucosa o cuerpos cetónicos de la grasa como fuente de energía, pero el cáncer esta metabólicamente limitado a utilizar únicamente glucosa. Las células cancerosas en su mayor parte carecen de flexibilidad metabólica y simplemente no pueden metabolizar las cetonas, y esta es la razón por la que la cetosis nutricional parece ser tan eficaz contra el cáncer.

El cáncer en realidad podría ser clasificado con más precisión como una enfermedad metabólica mitocondrial. Pocas personas heredan genes que los predisponen al cáncer. La mayoría heredan genes que previenen el cáncer. Las mutaciones heredadas típicamente interrumpen la función de la mitocondria, y un riesgo elevado de cáncer es el resultado de esa debilidad

La buena noticia es que puede optimizar su función mitocondrial al abordar ciertos factores de estilo de vida tales como la alimentación y el ejercicio, y este conocimiento presenta toda una nueva posibilidad de entender y tratar el cáncer.

Según lo explicado por Fettke, el modelo metabólico del cáncer «gira en torno a la energía y el crecimiento; las mutaciones cromosómicas aleatorias son secundarias «Además.:

«Todas las células requieren una fuente de energía de trifosfato de adenosina (ATP, por sus siglas en inglés). También requieren materiales de construcción que son, ya sea administradas localmente o transportadas en las células normales para convertir la glucosa principalmente en ATP y un poco para el mantenimiento.

Las células cancerosas hacen lo contrario. Hay una desviación de glucosa de la producción de ATP a los materiales de construcción necesarios para el crecimiento celular… Los otros materiales de construcción requieren proteínas y ácidos grasos y el cáncer los absorbe de su alrededor.

Esa invasión en el tejido circundante es la manera en que el cáncer se propaga y se convierte en metatásico… Esa fuerza impulsora detrás de todo esto es la producción de radicales libres de oxígeno.

Creo que la producción de radicales libres posteriormente causa daño en el ADN de una manera aleatoria, y representa las anomalías cromosómicas. Por lo tanto, si pudiéramos encontrar la fuente de radicales sin oxígeno, podríamos encontrar el hilo».

Una Alimentación a Base de Alimentos Procesados es un Importante Factor que Promueve el Cáncer

¿Qué es lo que impulsa la producción de radicales libres? La inflamación es un factor importante, y nuestra actual alimentación a base de alimentos procesados es altamente inflamatoria.

Los principales culpables incluyen las grasas poliinsaturados (PUFAs), grasas trans y azúcar en todas sus formas, especialmente la fructosa procesada (como el jarabe de maíz de alta fructosa), así como también los granos refinados. Los ingredientes artificiales también pueden promover la inflamación.

Al reducir la cantidad de carbohidratos netos que come, logrará cuatro cosas que equivalen a menor inflamación y menor estimulación del crecimiento del cáncer. Sera capaz de:

  1. Disminuir su nivel de glucosa en suero
  2. Reducir su nivel de mTOR
  3. Reducir el nivel de insulina
  4. Baja su factor de crecimiento insulínico tipo 1 (IGF-1, una potente hormona que actúa sobre la glándula pituitaria para causa efectos metabólicos y endocrinos, incluyendo el crecimiento y la replicación celular. Los niveles elevados de IGF-1 están asociados con el cáncer de mama, entre otros)

De hecho, una de las razones básicas por las que una alimentación con alto contenido de grasa y baja en carbohidratos netos (cetosis nutricional) es tan eficaz es porque disminuye la inflamación hasta hacerla desaparecer. Y cuando la inflamación desaparece, su cuerpo puede curarse.

Que Necesita el Cáncer para Desarrollarse

Con el fin de prosperar y desarrollarse, las células cancerosas necesitan combustible en forma de glucosa, además de los materiales de construcción en forma de proteínas, ácidos grasos, fosfato y acetato. Estos materiales de construcción no están fácilmente disponibles en el torrente sanguíneo, por lo tanto, las células cancerosas los obtienen de las células circundantes.

El proceso que le permite a las células cancerosas invadir el tejido circundante se conoce como el Efecto Warburg Inverso. Este efecto se basa en la generación de peróxido de hidrógeno causado por la interacción entre los radicales y agua, libres de oxígeno.

El cáncer metastástico o invasivo, en esencia, es el resultado del efecto Warburg y el efecto Warburg inverso. Le recomiendo encarecidamente ver el video presentado para obtener un mejor entendimiento sobre estos procesos, y cómo contribuyen a la formación y propagación del cáncer.

Como lo indica Fettke, conocer todo esto, nos presenta un nuevo conjunto de opciones de prevención y tratamiento contra el cáncer, incluyendo los siguientes:

  • Limitar o eliminar el azúcar y los carbohidratos netos (carbohidratos sin fibra) para evitar alimentar a las células cancerosas
  • Limitar o eliminar los aceites y las grasas  PUFA y las grasas trans para prevenir la formación de radicales libres dañinos y las partículas de LDL dañinas,  pequeñas y densas.
  • Limitar las proteínas (le recomiendo utilizar una fórmula de medio gramo de proteína por libra de masa corporal magra) para evitar estimular la vía mTOR
  • Aumentar el consumo de antioxidantes (a través de los alimentos y/o suplementos) para contrarrestar el daño de los radicales libres
  • Aumentar el consumo grasas saludables para alimentar a las células sanas, mientras deja morir de hambre a las células cancerosas

La Importancia de una Dieta para un Exitoso Tratamiento Contra el Cáncer

Recuerde, el aspecto fundamental que debe abordarse es el defecto mitocondrial metabólico, y esto implica reducir radicalmente los carbohidratos sin fibra y aumentar las grasas de alta calidad. Esto no significa que una dieta baja en carbohidratos totales. Necesita incluir muchos vegetales frescos, orgánicos y llenos de fibra (bajo contenido de carbohidratos).

En realidad puede consumir muchos cientos de gramos de vegetales por día, ya que las fibras se convierten en ácidos grasos de cadena corta, lo que mejorará su capacidad de quemar grasa como combustible y también nutrirá su microbioma.

Puede reemplazar entre un 70 a 85 % de  carbohidratos sin fibra con grasas saludables, junto con una cantidad moderada de proteínas de alta calidad, ya que el exceso de proteína también puede desencadenar el crecimiento del cáncer al estimular la vía mTOR, que acelera el crecimiento del cáncer. Esa es la verdadera solución. Si no lo hace, es posible que no funcionen otros tratamientos.

De acuerdo con Fettke, los estudios han demostrado que la cetosis nutricional, es decir una alimentación alta en grasa y baja en carbohidratos netos mejora significativamente los resultados de salud en los pacientes que se realizaron un tratamiento convencional contra el cáncer,  como la quimioterapia.

También es importante recordar que la glucosa es un combustible inherentemente «malo», ya que a diferencia de la quema de grasa, genera especies de oxígeno mucho más reactivas y radicales libres secundarios. Pero para quemar grasa, las células deben estar sanas y normales. Las células cancerosas no tienen la flexibilidad metabólica para quemar grasa y es por ello que una alimentación alta en grasas saludables parece ser una estrategia tan efectiva contra el cáncer.

Cuando su cuerpo deja de quemar glucosa como su principal combustible con el fin de quemar grasa como combustible, las células cancerosas empiezan a luchar para mantenerse con vida, y dado a que la mayoría de sus mitocondrias son disfuncionales y no pueden utilizar eficazmente el oxígeno para quemar el combustible.

Al mismo tiempo, las células sanas son suministradas con combustible ideal y preferido, lo que reduce el daño oxidativo y optimiza la función mitocondrial. El efecto final es que las células sanas comienzan a prosperar mientras que las células cancerosas mueren de hambre.

Directrices Generales de Proporción de Nutrientes para un Salud Mitocondrial y Prevención del Cáncer

Para una salud óptima, necesita una cantidad suficiente de carbohidratos, grasas y proteínas. Sin embargo, desde el advenimiento de los alimentos procesados ​​y la agricultura industrial, cada vez es más importante ser específico cuando con el tema de los nutrientes.

Hay grasas saludables y no saludables. Lo mismo ocurre con los carbohidratos y las proteínas. Gran parte de los beneficios o riesgos están relacionados con la forma en que los alimentos son cultivados, criados y/o procesados.

Para lograr la cetosis nutricional, es importante monitorear la cantidad de los carbohidratos netos y el consumo total de proteínas. Los carbohidratos netos se calculan tomando el número total de carbohidratos en gramos y restándole la cantidad de fibra que contienen los alimentos.

El resultado es carbohidratos netos. Para una salud óptima y prevención de enfermedades, le recomiendo mantener su consumo total de carbohidratos netos por debajo de 40 o 50 gramos por día.

Como Convertir sus Requerimientos de Proteína en Alimentos

Puede encontrar cantidades importantes de proteína en la carne, pescado, huevos, productos lácteos, legumbres, frutos secos y semillas. Algunos vegetales también contienen cantidades generosas de proteínas–por ejemplo, el brócoli. Para determinar si está consumiendo demasiada proteína, simplemente calcule su requerimiento en base a su masa corporal magra al restar el porcentaje de grasa corporal de 100, y anotar todo lo que come durante unos días.

Posteriormente, calcule la cantidad de proteína que consume diariamente, de todas las fuentes. Una vez más, su objetivo debe ser medio gramo de proteína por libra de masa corporal magra. Si actualmente come mucho más de lo que es considerado óptimo, disminuya la cantidad según sea necesario. Puede utilizar la tabla de abajo o simplemente buscar en Google los alimentos que desee investigar y rápidamente encontrará los gramos de proteína en ese alimento.

Carne roja, carne de cerdo, aves y mariscos un promedio 6.9 gramos de proteína por onza.

Una cantidad ideal para la mayoría de las personas sería una porción de 3 onzas de carne o mariscos (no 9 o 12 onzas de filete), Que le proporcionará aproximadamente de 18 a 27 gramos de proteína

Los huevos contienen alrededor de 6-8 gramos de proteína por huevo. Así que un omelet hecho de dos huevos equivale a unos 12 a 16 gramos de proteína.

Si agrega queso, también es necesario calcular esa proteína (revise la etiqueta de su queso)

Las semillas y frutos secos contienen un promedio de 4-8 gramos de proteína por cada cuarto de taza Los frijoles cocidos tienen un promedio de 7.8 gramos por cada media taza
Los granos cocinados tiene un promedio de 5-7 gramos por taza La mayoría de los vegetales contienen alrededor de 1-2 gramos de proteína

Cuidado con las Grasas No Saludables

Cuando se trata de la grasa, es muy importante distinguir entre las grasas saludables y no saludables. La mayoría de las grasas que las personas comen en realidad son poco saludables. Como regla general, evite todos los aceites vegetales procesados ​​y envasados, que por lo general son altos en grasas omega-6 dañadas.

También tenga cuidado con el aceite de oliva. Si bien es saludable, hasta el 80 % de los aceites de oliva comerciales en realidad fueron adulterados con aceites vegetales de omega-6 oxidados, así que asegúrese que cuente con la certificación de autenticidad por una agencia reguladora.

Otra regla general: no le huya a las grasas saturadas de fuentes naturales. Son algunas de las más saludables. Las fuentes de grasas saludables que desea incluir en cantidades indiscriminadas incluyen:

Aceitunas y aceite de oliva (con certificado de autenticidad) Cocos y aceite de coco Mantequilla hecha de leche orgánica de vacas alimentadas con pastura ymantequilla de cacao
Frutos secos sin procesar, tales como,macadamia y pecanas, y semillas como sésamo negro,  comino, calabaza y cáñamo Yemas de huevo de gallinas camperas Aguacates
Carnes de animales de pastoreo Manteca de cerdo, sebo y manteca Grasas omega-3 de fuentes animales como el aceite de kril

La Cetosis Nutricional Puede Ofrecerle Esperanza y Salud

Fettke termina su conferencia mencionando una serie de beneficios conocidos de la cetosis nutricional en el tratamiento contra el cáncer, incluyendo las siguientes:

Es seguro Es bien tolerado
Puede utilizarse con otros tratamientos contra el cáncer (e incluso podría mejorar la  eficacia de los tratamientos convencionales contra el cáncer) Las cetonas protegen a las células circundantes, lo que reduce el poder del cáncer para propagarse
Les proporciona a los pacientes una sensación de control, lo que ha demostrado mejorar las tasas de supervivencia Si es considerado útil como un tratamiento, también debe ser considerado para la prevención
Les da esperanza a los pacientes, lo que también aumenta supervivencia Es el tratamiento contra el cáncer más asequible que existe

Un Experimento Radical en la Cetosis Nutricional

Para darle una idea de cómo la cetosis nutricional puede beneficiar a su salud más allá de la prevención del cáncer, considere el caso del Dr. Peter Attia. Su experimento es un ejemplo muy claro de los efectos que puede tener la alimentación en los marcadores de salud en general.

Attia es un médico capacitado en la Universidad de Stanford con una pasión por la ciencia metabólica, quien decidió utilizarse como una rata de laboratorio—obteniendo resultados increíbles. En el siguiente video, menciona su experimento.

A pesar de que siempre ha sido activo y ha estado en forma, él no tenía la genética en su favor. Su tendencia natural esta inclinada hacia el síndrome metabólico, a pesar de ser muy diligente con su alimentación y ejercicio. Así que decidió experimentar con la cetosis nutricional para ver si podía mejorar su estado de salud general.

Durante un período de 10 años, consumió el 80 % de sus calorías de grasa saludable y controla continuamente sus marcadores metabólicos, tales como los niveles de azúcar en la sangre, porcentaje de grasa corporal, presión arterial, niveles de lípidos y otros.

Él experimentó mejoría en todos los niveles de salud, como puede ver en la siguiente tabla. Una resonancia magnética confirmó que no solo había perdido gasa subcutánea, sino también grasa visceral, que es el tipo más perjudicial. Su experimento demuestra cómo la alimentación puede producir grandes cambios en su cuerpo, a pesar de empezar en un muy buen estado. Y en caso que empiece en un bajo nivel físico, entonces los cambios que experimentará incluso serán mucho más pronunciados.

ANTES DESPUÉS
Azúcar en la sangre en ayunas 100 75 to 95
Porcentaje de grasa corporal 25 10
Circunferencia de la cintura en pulgadas 40 31
Presión arterial 130/85 110/70
LDL 113 88
HDL 31 67
Triglicéridos 152 22
Sensibilidad a la insulina Aumentó en más de 400 % Aumentó en más de 400 %

 

Artículo extraído de http://espanol.mercola.com/

Imagen de la portada: Diseñado por Freepik

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