Sentir gratitud luego de haber sufrido una infidelidad no tiene mucho sentido a simple vista, pero hay razones para ver con buenos ojos una decepción amorosa, o que te hayan sido infiel, en especial a medida que el dolor se desvanece.
Algunos estudios biológicos reconocen que la arquitectura de nuestro cerebro podría hacernos propensos a ser infieles bajo ciertas circunstancias. También hay evidencia de una posible relación con el alelo 334, encargado de regular la vasopresina, y la infidelidad.
Sea cual sea la causa que creamos responsable de un engaño, el panorama siempre aclara con el tiempo y, cuando superamos el mal trago, es más sencillo ver “el lado bueno” de la desilusión.
Estas son solo tres de las muchas razones para agradecer con el alma a quien traicionó tu confianza:
1. Una infidelidad te da la oportunidad de conocerte mejor
La culpa y la ira son respuestas comunes cuando descubrimos una infidelidad. Por un lado, puede que sintamos remordimiento por “no haber hecho lo suficiente” para satisfacer a nuestra pareja; en el extremo contrario, es posible que estemos convencidos de haber dado todo lo que teníamos, y un engaño en esas condiciones es fulminante para la dignidad.
Pero, ¿qué pasaría si te detienes a escuchar los “motivos” de tu ex pareja? No significa que le des la razón, pero puede que descubras aspectos de tu personalidad que desconocías, como puede que la opinión de tu contraparte haga que te des cuenta de que había puntos débiles en la relación que jamás notaste.
Si realmente hubo señales de alerta que pasaste por alto, pregúntate qué puede enseñarte esta experiencia de ti mismo. ¿Lidias maduramente con los problemas de pareja, o los ignoras?
2. En el proceso de recuperarte, tu amor propio se fortalece
Luego de una infidelidad, nuestra relación con nosotros mismos cambia. Identificarás que hay principios que no estás dispuesto a ceder en pareja, y te será más sencillo que antes saber el tipo de relación que quieres, y el tipo de relación que conviene dejar a un lado a tiempo.
Considera que, cuando hayas superado la decepción, descubrirás que no necesitas una “media naranja” que te diga lo valioso que eres o te haga sentir “seguro y amado”, ya que el dolor habrá sacado lo mejor de ti y sabrás muy bien:
- De lo que eres capaz
- La magnitud de tu resistencia
- Lo que mereces y lo que no
3. Una pareja infiel te muestra la verdad acerca del amor
Si veías el amor en pareja como una fantasía caricaturesca, vivir una infidelidad será, en principio, trágico, pero eventualmente te abrirá los ojos a la verdad: el amor es cultivable y las relaciones son un puente que debe sostenerse de ambos lados.
Todo este proceso te llevará a construir una autoestima mejorada y ser más asertivo en relaciones futuras.
Además, puede que sufrir una infidelidad te enseñe que las desilusiones amorosas no siempre tienen que ver con ser o no feliz en pareja. Ser infiel tampoco define si una persona es buena o mala (aunque parezca ser una prueba fehaciente), pero sí define nuestra capacidad para perdonar y dejar ir.
También te puede interesar: ¿Se puede perdonar una infidelidad?
Está claro que pensar en los atributos positivos de la infidelidad no es algo que vaya a ocurrir al día siguiente de “atrapar” a tu pareja con las manos en la masa o enterarte de su conducta engañosa por un tercero. Date tiempo, y permítete vivir las emociones de rabia e indignación que seguramente sentirás a flor de piel durante los primeros meses.
El tiempo es un maestro. Deja que te lleve de la mano.
Referencias:
(2017). Why I’m Thankful That I Was Cheated On. Disponible en: https://thoughtcatalog.com/scarlett-red/2017/03/why-im-thankful-that-i-was-cheated-on/
(2014). 10 facts about infidelity. Disponible en: https://ideas.ted.com/10-facts-about-infidelity-helen-fisher/
Read moreMaría José Lacámara – Conoce más AQUI
Instagram: @joselacamarapsicologa
Los invitamos a conocer nuevo libro de María José Lacámara
Más conectados: La conexión emocional como eje central de la crianza
La psicóloga infanto-juvenil María José Lacámara publica este libro que busca ayudar a padres y madres a encontrar un método de crianza propio, que se ajuste a sus necesidades y les permita sintonizar con lo que requieren sus hijos.
Lo pueden encontrar en: Contrapunto, buscalibre, Antártica, que leo, editorial planeta y en formato digital.
Para hablar de este concepto, me gustaría primero descomponer y comprender sus palabras, entonces tenemos a – mor y pro – privo, donde lo primero significa sin muerte, es decir vida, y lo segundo lo privado, es decir, amor propio podría significar; tu vida privada, el amor a lo privado ó el amor a tu intimidad.
Desde una mirada más profunda, el amor propio refiere a saber quién eres, donde estás, conocerte y validarte, y esto incluye el saber que quieres, como y donde, entonces cuando comienzas a trabajar sobre este mapa, estás potenciando tu amor propio.
Para esto es necesario tener el coraje para que todo lo externo a ti deje de construirte, que la cultura no sea lo que te defina por completo, esto incluye la sociedad, familia, pareja, hijos, trabajo.
Es preciso deconstruir ciertos conceptos integrados desde la infancia para lograr lo anterior, como cuestionar que significa ser mujer, que es la belleza para ti, y como le das valor a tu cuerpo femenino.
Generalmente el amor propio esta vinculado a como la mujer acepta o no su cuerpo, ante lo cual algunas autoras mencionan que es necesario construir cierta adoración al cuerpo femenino como respuesta al profundo desprecio y desvalorización del mismo.
Entonces es urgente que la mujer se empodere de su cuerpo, que le de poder, no solo aceptándolo desde la forma, sino también interiormente reconociendo toda su magia y sabiduría que habita en ella, para así liberarnos de los estereotipos impuestos que están logrando que muchos cuerpos femeninos sean intervenidos quirúrgicamente consiguiendo un amor propio que no apunta a lo real.
Es importante aquí hacer una diferencia, ya que hay una visión del amor propio que dice que debes amar tu cuerpo tal cual es, pero no te dicen por qué debes hacerlo, y explicar esto agrega una semilla de consciencia al mensaje, lo cual permite a la mujer hacer el clic y realmente iniciar la transformación.
Con esto me refiero a que la mujer debe amar su cuerpo no simplemente como es, sino que por lo que el cuerpo le posibilita, lo cual es vivir, sentir y hacer, entender que el cuerpo es la forma concreta que tiene para manifestarse en la vida, y que no existe otra manera de vivenciar que no sea a través de su corporalidad.
Enseñar esto a las niñas es fundamental, “amar el cuerpo porque es el medio por el cual va a tener todas sus vivencias, por esto hay que cuidarlo, respetarlo y amarlo, ya que sin el no podrá hacer nada, y entonces pondrá consciencia desde la alimentación hasta lo que hace con él.”
Esta es la razón mas profunda de porque la mujer debe amar su cuerpo, más allá de solo aceptar como es, ya que ese discurso de algún modo también tiene una traza patriarcal, que es amar al cuerpo por su forma y no por el propósito real que tiene en la vida de la mujer, que es vivir cada experiencia.
Así dejará de buscar validación externa, siendo para ella misma y no en respuesta a la sociedad.
Irina Duran Martínez Psicóloga de Mujeres
Viña del Mar
Photo by bruce mars from Pexels
Read more