Conversando con una amiga acerca de la acumulación de objetos en las casas, sobre todo aquellos “valiosos” heredados por nuestros padres, que atiborran las bodegas,[1] es que me puse a pensar en la capacidad para la toma de decisión y como se vincula con las emociones.
Cada una de nosotras(os)[2] lleva un saquito sobre la espalda, o en la cintura si nos parece más cómodo como decía una antigua mentora mía[3], que contiene la historia familiar, los anhelos, las tristezas, los momentos gratos, los éxitos y fracasos, las creencias, los miedos, los ideales y todo aquello que representa la vida. Desde ahí actuamos.
Por ende, ordenar el cajón del velador, encontrar el primer zapatito de una de las hijas(os), o aquella tarjeta de navidad algo especial, nos provoca nostalgia y nos impide renunciar a esos objetos. Se vuelve a guardar, esta vez ordenado en una pequeña bolsa hasta que, quizás y simplemente, la nueva generación lo bote.
Tomar la decisión de vaciar aquellas bodegas es equivalente a limpiar nuestros afectos que están desordenados y ello demanda energía. Y no es gratis.
Al decidir siempre hay incertidumbre. Requiere carácter para comprender que es posible equivocarse. Aceptar ese potencial error futuro y asumirlo con ánimo en la certeza que la decisión tomada es el mejor resultado del momento.
Y decidir con emoción incluida no tiene que ver con el género.
Al iniciar este articulo quise poner las emociones desde lo femenino, instalándolo como una habilidad de liderazgo[4] propia de nosotras, sin embargo, éstas existen en la naturaleza de nuestro ser básico[5]. Están siempre ahí, en su ardiente desorden. Por ello, es interesante pensar cómo la emoción influye en cada uno, según sus vivencias o su realidad, qué pensamientos provocan o cuánto las escuchamos en la toma de decisiones, ¿qué espacio les damos? No es cosa de género, es madurez; mi humilde hipótesis.
Opino que lo mismo ocurre en las empresas. Donde los números hablan con seguridad y las propuestas estratégicas se explican con buena retórica, finalmente cada decisión llega desde las personas en su condición de tal, con toda su humanidad. Intuyen y preguntan, trayendo al presente ese maletín de vida que además de conocimientos, incluye emociones.
Marcela Contreras Berrios – Conoce más a Marcela aqui
__________________________
[1] Pura verdad. Muchas bodegas familiares contienen los adornos familiares, ese matecito de plata, el jarrón del matrimonio, por poner ejemplos. (Una amiga guarda el ajuar de su abuela, quien se casó en 1920).
[2] Ya sabemos que no es la correcta forma gramatical. Mayor explicación en artículos anteriores de pioneras.
[3] Se llamaba Iris Müller.
[4] En el excelente libro de Tatiana Camps, se mencionan algunas habilidades del liderazgo femenino.
[5] La Rae señala para la palabra básico (a):
- adj. Que tiene carácter de base o constituye un elemento fundamental de algo.
- adj. Excesivamente sencillo o falto de complicación.
La palabra Ser en la Rae es casi un tratado. Entonces, por mi parte, entiéndase como ser básico aquel que es innato en la naturaleza de cada persona, el que no se ha domesticado, el que aún no sabe hablar según sea políticamente correcto, aquel que actúa según siente.
[1] Pura verdad. Muchas bodegas familiares contienen los adornos familiares, ese matecito de plata, el jarrón del matrimonio, por poner ejemplos. (Una amiga guarda el ajuar de su abuela, quien se casó en 1920).
[1] Ya sabemos que no es la correcta forma gramatical. Mayor explicación en artículos anteriores de pioneras.
[1] Se llamaba Iris Müller.
[1] En el excelente libro de Tatiana Camps, se mencionan algunas habilidades del liderazgo femenino.
[1] La Rae señala para la palabra básico (a):
- adj. Que tiene carácter de base o constituye un elemento fundamental de algo.
- adj. Excesivamente sencillo o falto de complicación.
La palabra Ser en la Rae es casi un tratado. Entonces, por mi parte, entiéndase como ser básico aquel que es innato en la naturaleza de cada persona, el que no se ha domesticado, el que aún no sabe hablar según sea políticamente correcto, aquel que actúa según siente.
Foto portada: de Sarah Chai
Read more
Durante el último tiempo con bastante frecuencia columnistas, políticos y comentaristas, para criticar a la Convención Constituyente, al Congreso o a los Partidos Políticos, los comparan con un consejo de curso o asamblea escolar.
Basta ya de mirar tan despectivamente a los niños, niñas y adolescentes.
Los consejos de curso son espacios para que estudiantes practiquen progresivamente algunas competencias fundamentales para el ejercicio de una ciudadanía responsable. En muchas comunidades escolares, las y los estudiantes demuestran ser capaces de organizarse eficientemente para fines altruistas, debatir ideas y resolver sus conflictos de manera pacífica. Que estas instancias funcionen bien o mal, depende en gran medida del acompañamiento que reciban de parte de los adultos que están a cargo.
El nivel de maltrato, violencia verbal y carencia de habilidades de resolución de conflictos, que se observa entre nuestros políticos actualmente, y entre adultos, como se puede ver en diferentes redes sociales, es igual o peor a comportamientos similares entre escolares.
Somos los adultos quienes estamos modelando y fijando los estándares de lo que es un debate democrático, inclusivo y respetuoso, para nuestros niños, niñas y adolescentes.
¿Cómo estaríamos como país si los adultos practicáramos más la toma de perspectiva de otros, la escucha activa, el mostrar aprecio y valoración por la diferencia?
Las escuelas proveen de un ambiente especialmente valioso para la práctica de estas competencias y otras más, que conforman la ciudadanía responsable. El que se logren los resultados esperados depende de cómo los adultos guien el proceso y en especial en cómo modelan estas mismas habilidades.
¿Cómo nos comunicamos los adultos en la comunidad? ¿Cómo resolvemos nuestras diferencias? ¿Cuánto se toma la perspectiva de otros en la toma de decisiones? ¿Qué tantos espacios de participación existen? ¿Cuánto manifestamos el aprecio?
Luego, podemos revisar si esos estándares de convivencia respetuosa se están transmitiendo hacia los estudiantes.
Con nuestro barómetro socioemocional puedes medir diversos factores del ambiente escolar, como la calidad de los vínculos, el liderazgo, el feedback que se recibe, la autonomía, el sentido de pertenencia, entre otros. Tendrás un reporte online con todos los resultados y un reporte escrito con sugerencias para la acción.
Estamos viviendo momentos complejos como sociedad. Se percibe desconfianza en las instituciones, malestar, violencia en muchas ocasiones y división. Las escuelas pueden ayudar a recuperar el sentido de comunidad, educando en las competencias para una ciudadanía involucrada y generando esa sensación de seguridad y pertenencia que tienen los grupos sociales positivos. Que nuestros niños, niñas y adolescentes vivan en su comunidad escolar una experiencia de inclusión y participación que les prepare para contribuir a este país y a este mundo con todas sus fortalezas.
Read more
¿No os sentís a veces como protagonistas de un libro de “elige tu propia aventura”?. Ojalá pudiésemos volver atrás y probar las dos alternativas cuando, de repente, tienes que tomar una decisión que te abre o no la puerta a una nueva aventura:
¿Me cambio de trabajo? ¿Acepto la oferta? ¿Pido un cambio en la empresa? ¿Emprendo? ¿Aceptamos una expatriación? ¿Tengo esa conversación tan incómoda con mi jefe?…
Estas son algunas de las preguntas clave que siempre me ayudan a tomar decisiones:
❓ ¿Cuales son los costes y los beneficios de cada alternativa?.
❓¿Qué es lo peor que podría pasar?.
❓ ¿Qué hiciste en experiencias anteriores parecidas y cuál fue el resultado? ¿qué aprendiste?.
❓¿Para qué vas a decir que si/no?.
❓¿Qué te pide el ♥️ ? en mi caso siempre pesa más que la cabeza…
Y, por supuesto, siempre comparto mis reflexiones con aquellas personas a las que admiro y las escucho con los 5 sentidos pero sin perder nunca mi brújula porque lo cierto es, que sólo yo tengo la respuesta adecuada…
(Y al final dije que no. A veces, decir que no, es también de valientes).
Conoce más a Blanca Rodriguez AQUI
#decisiones #CoachingEjecutivo #Desarrollo
Read more
Decir en público que no tienes hijos por opción es como salir del closet. Eso siento. En mi círculo cercano es conocida mi postura al respecto desde que era muy joven, y afortunadamente encontré un compañero de vida que lo comparte. Ahora que ya cumplí cuarenta me siento capaz de hablarlo abiertamente sin que me importe ser juzgada. Antes respondía con evasivas o inventaba algo para cortar el tema. Hace unos años me sentí tan agobiada a la pregunta obvia que respondí diciendo que no podía tener hijos y nunca más me preguntaron ¡santo remedio! Mentí para no ser cuestionada, pero ¿por qué tenemos que tener motivos convincentes y dar explicaciones?
Para nosotros como familia no tener hijos fue una decisión que tomamos muy conscientemente en pareja. Simplemente no queremos tener hijos, es el estilo de vida que tenemos y que queremos conservar en el futuro. En lo personal no postergué la maternidad por mi desarrollo profesional ni tampoco puedo decir que no pude priorizar la maternidad por mi trabajo. Simplemente, nunca estuvo en mis planes y así lo sigo manteniendo.
Comúnmente esta confesión va acompañada de otra explicación: no odiamos a los niños. Al contrario, tenemos la dicha de cumplir el rol de tíos y padrinos. También, dentro de las actividades que realizo fuera de mi vida laboral, participo como madrina y embajadora en una fundación que busca que las niñas alcancen sus sueños y crean en sí mismas y en sus capacidades.
En mi experiencia, las mujeres somos más juzgadas que los hombres en este tipo de decisiones. A ellos se les pregunta menos o simplemente no se les pregunta, pero la decisión de no tener hijos no es un asunto solo de mujeres, ellos también deciden no serlo, sin embargo, las estadísticas y estudios que abordan esta problemática se enfocan en las mujeres. Pero ¿cuántas mujeres sí quieren tener hijos y su pareja no? ¿Cómo medimos la intención de ser padres o madres? ¿Cómo se puede incluir la perspectiva de género en las estadísticas de la población que evidencien esta realidad? El año 2019 el Centro de Microdatos de la Universidad de Chile realizó una interesante aproximación con el estudio “Caracterización de la población que decide tener o no hijos en el futuro”, a partir de estadísticas públicas disponibles de los años 2002, 2004 y 2006. Asimismo, hace poco leí un artículo en el que abordaban este tema a partir de un estudio que está realizando la Universidad Estatal de Michigan en Estados Unidos, y los autores plantean que las tasas de fertilidad en Estados Unidos se han desplomado a mínimos históricos, y que esto podría estar relacionado con el hecho de que más personas eligen no tener hijos. Pero ha sido complicado para los investigadores determinar cuántos adultos “sin niños” hay porque las estadísticas oficiales no los acompañan.
Existen muchos desafíos que se deben abordar a partir de la elaboración y actualización de las proyecciones de la población, por lo que pareciera ser que el levantamiento de las cifras tradicionales puede no ser concluyentes frente a las nuevas tendencias del comportamiento humano. Determinar y comprender por qué las personas, hombres y mujeres por igual, deciden tener o no hijos, cobra gran importancia. Como decía anteriormente, esto no es un tema solo de mujeres, aunque las estadísticas de hoy nos pongan en el banquillo.
Paula Torres Ordenes – Conoce mas a Paula aquí
Ingeniera Agrónoma MBA
Foto portada de RODNAE Productions en Pexels
Read more
Los problemas en pareja pueden venir desde varias vías: puede ser por falta de comunicación, tomar decisiones, tener objetivos incompatibles entre sí, etc.
En esta ocasión vamos analizar con calma que se puede hacer cuando surgen problemas de pareja.
Una de las primeras observaciones que les dejo a mis pacientes a diario es que las diferencias con tú pareja no van acabarse con el fin de este problema. Siempre que nos enfrentamos a otra persona pueden aparecer roces, ideas que se oponen a las tuyas pero lejos de alarmarte hay que ser más creativos y respetar al otro antes de seguir criticándolo.
Entonces, debemos inicialmente preparar nuestra mente y buscar un espacio sano para conversar acerca de esa diferencia que tenemos. La mente así como cualquier otro musculo necesita que lo preparemos antes de una conversación.
Es importante destacar que las palabras en medio de una discusión para solucionar el problema son muy valiosas. Es necesario que tengamos mucho cuidado a la hora de expresarnos, no se trata de rebajar o menospreciar lo que opina tú pareja sino al contrario, tomar en cuenta lo que dice para poder negociar con asertividad.
Hay que ser valientes para mirar este problema que tenemos en pareja directo a la cara. No se puede seguir evadiendo porque cada vez que lo hacemos nos alejamos de la solución y posiblemente estamos sembrando la semilla del rencor.
Finalmente conversar, negociar y valorar al otro debe desencadenar en TOMAR DECISIONES. Estas serán la guía con las que podemos finalmente resolver el problema, por eso hay que ser valientes a la hora decidir y hacerlo siempre por el bien de AMBOS para que todo vuelva a la armonía.
Fray Martínez
Psicólogo, Autor y Conferencista
http://psiqueactiva.blogspot.com.es/
Read more
Son el 22% de las mujeres, tienen entre 45-60 años, están en su mejor momento profesional, con las prioridades claras y más tiempo para ellas. Se cuidan, controlan su futuro, son estratégicas, líderes, comprometidas y pertenecen al universo que toma el 80% de las decisiones de compra del planeta. La Mujer.
Pero son invisibles. Según el Geena Davis Institute on Gender Media; las marcas y la publicidad no las ve. En Estados Unidos son las PrimeTimeWomen y controlan 19 trillones de dólares. Según Marti Barletta, son el target más poderoso y las marcas deben darles protagonismo. Se asocian entre sí para buscar alianzas, están preocupadas por el medio ambiente y por el impacto social y apoyan las empresas con valores. Si la gran empresa no las promociona, emprenden su negocio. Lisa Belkin del NYTimes lo bautizo como la “opt out revolution” en 2003.
Con canas y a lo loco. Son mujeres que lucen su edad mostrando la parte sexy, segura y poderosa del paso del tiempo. Son valientes y asertivas; no les importa caer mal. Nosotras las llamamos las “Big Sisters”; las hermanas mayores. Son nuestro referente, nuestras aliadas, nuestras cómplices.
De la tía Maria a la Big Sister. Pasan de ser las viejas aburridas a las maduras molonas. Las marcas han seducido a estas mujeres tratándolas de marujas, tía Maria o solteronas. Nada más lejos de la realidad. Son absolutamente inspiracionales y modelos a seguir para las generaciones más jóvenes. Quieren marcas que rompan estereotipos, con impacto social, una buena historia que contar y que abanderen la lucha feminista. Buscan marcas que las visibilizen.
Las Big Sisters son las reinas del consumo porque no solo compran para ellas, compran para toda la familia. Quieren ver publicidades con mujeres de 45-60 años para anunciar sus productos, no solo para productos de salud o viajes del imserso, sino también para coches, zapatillas de correr, productos financieros, ropa interior o safaris a África. Como decía Carmen Alborch “somos malas pero podríamos ser peores”.
Extraído de: Gemma Cernuda, columnista en El Periódico de Catalunya
@peixco
Read more
Los humanos no evolucionamos para tomar decisiones lógicas, evolucionamos para sobrevivir. Y los sesgos cognitivos nos han ayudado a cumplir ese propósito. Pero el mundo moderno presenta muchos escenarios que exigen cálculos más racionales, y a menudo nos sentimos frustrados, preguntándonos por qué no obtenemos los resultados deseados. Además, creemos que somos muy objetivos y lo hacemos todo estupendamente.
Un sesgo cognitivo es un patrón sistemático que tercia la racionalidad en el juicio. Los sesgos cognitivos a veces pueden conducir a una distorsión perceptiva, a un juicio inexacto, a una interpretación ilógica o lo que en general podríamos llamar irracionalidad.
Algunos sesgos cognitivos son presumiblemente adaptativos, para lograr acciones más rápidas, y otros sesgos cognitivos son una consecuencia de las limitaciones del procesamiento humano.
¿En cuántos sesgos incurrimos los seres humanos? Parece que los principales son 17 aunque la lista definitiva de sesgos cognitivos probablemente proviene de Wikipedia, que identifica 104 sesgos, algunos tomados un poco por los pelos, eso sí.
Cualquiera sea el número exacto, hay suficientes sesgos cognitivos para que consultoras líderes como McKinsey ahora tengan prácticas de “de-sesgado” para ayudar a sus clientes a tomar mejores decisiones.
Lo que sí podemos hacer es organizar los diversos sesgos en cuatro categorías principales, para que nos ayude a pensar en cómo surgen los prejuicios en nosotros y cómo podríamos superarlos. Las cuatro categorías serían:
- Sesgos que surgen de tener demasiada información: Por ejemplo, cuando nuestra mente nos presenta elementos ya preparados procedentes de la memoria. Nos fijamos pues en detalles que confirman nuestras creencias, sin ningún tipo de cuestionamiento.
- No hay suficientes datos: Completamos espacios en blanco con estereotipos y experiencia previa. Concluimos que aquello con lo que estamos familiarizados es mejor que lo que nos resulta extraño o ajeno.
- Cómo recordamos: Sucede cuando reducimos acontecimientos (y recuerdos de los mismos) a elementos clave de entonces. Editamos recuerdos después del hecho. Combinamos recuerdos que ocurrieron en momentos similares aunque en diferentes lugares o que sucedieron en el mismo lugar aunque en diferentes momentos o con las mismas personas, etc.
- Necesidad de actuar rápido: Esto ocurre cuando favorecemos opciones simples con información más completa por encima de opciones más complejas con información menos completa. Y tenemos tendencia a la inercia: si hemos comenzado algo, continuamos haciéndolo en lugar de cambiar a una opción diferente, aunque no sea ya una buena opción.
Estas cuatro categorías son útiles porque, a medida que tomamos decisiones, podemos hacernos preguntas simples, como: “¿Estoy sesgando mi percepción por exceso de información o no tengo suficientes datos para tener una visión neutral?”. Es muy importante que seamos capaces de cuestionar nuestros propios pensamientos, en lugar de creer que porque aparecen en nuestra mente han de ser tomado como una verdad absoluta y me he de fiar de mis creencias. Tenemos muchas tendencias perjudiciales que, de no ser conscientes de ellas y poder contemplarlas como tales, nos llevan a numerosos prejuicios, malas decisiones, a cometer injusticias y, como decía Kant, “a no ver las cosas como son, sino como somos nosotros”.
Autor: Mónica Esgueva
Fuente: El Huffington Post
Read more
¡De muchas maneras este libro fue un regalo!
Sin duda alguna, muchos de sus contenidos los pude asociar a partes muy características de mi personalidad, así como a ciertos períodos de mi vida laboral y personal. Pero quizás el paralelo más semejante con mi vida, está en el primer tercio del libro, sí, la similitud con diversos acontecimientos y decisiones en mi vida, todos relativamente recientes, pero sin llegar al extremo de uno de los protagonistas del libro. Muchos de los lectores se reconocerán en uno o ambos personajes principales del libro, o al menos en parte de ellos. Humildemente debo reconocer mi desconocimiento, ya que este libro editado hace dos décadas y con millones de copias vendidas, hasta hace uno días atrás no era parte consciente de mi registro mental bibliográfico.
Debo concluir que con la correcta lectura y organización de los elementos que incluye, puede ser un gran aporte para muchas personas. Si logras concatenar, procesar y extraer lo realmente valioso de las distintas técnicas que se presentan paso a paso, las que sin darte respiro son relatadas en un frenético avance, tendrás una gran herramienta en tus manos.
Podría ser una novela o una fábula espiritual, pero en realidad es un libro de autoayuda. Su débil argumento narrativo no es lo relevante, ya que es el pretexto para hilvanar una serie de directrices que describiré al final de este comentario. Si bien varios pasajes del argumento me hicieron ruido debido a algunas incoherencias, así como la adjudicación al más sabio de los personajes de frases célebres o conceptos de Albert Einstein, Pierre Teilhard de Chardin, Peter Drucker e incluso Wolfgang Mewes, atribuyéndole asimismo un bello cuento que en realidad es de Oscar Wilde. Pero no perdí de vista lo esencial del libro: por las similitudes que ya mencioné en el primer párrafo, en lo personal había puesto en práctica varios de los consejos, técnicas y tipos de decisiones que sugiere el libro, pero antes de leerlo. Puedo afirmar, que me han resultado relativamente exitosas. Con la ayuda de las restantes que aún no exploro y que son varias, así como su eventual aplicación sistémica, espero dar pasos que aún espero poder realizar. ¿Tú también?
No tengo nada en contra de libros de autoayuda, mientras no vendan ilusiones imposibles con supuestas fórmulas mágicas. Tampoco he mirado despectivamente a las personas que leen libros de autoayuda, por el contrario, felicito que tengan la inquietud por la búsqueda de soluciones y descubrimiento. Lo que frecuentemente no ayuda, es que a diferencia de lo que espera el lector, las respuestas no están en los libros sino en el propio lector, donde los libros sólo hacen de medio para la introspección y en pocos casos, logran la posterior acción.
Concluida su lectura, recorrí varios foros y blogs. Las opiniones vertidas por su gran número de lectores, en su mayoría considera que su lectura ha resultado determinante para una mejora personal, mientras que otras personas lo consideran desde intrascendente a detestable.
Continuará…
Ricardo Gevert – Adm. Industrial
www.gevert.com
Read more
Es muy probable que algo te está pasando en tu vida que te lleve a tener que tomar alguna decisión. Esto puede ir desde empezar una dieta, donde quieras dejar de consumir azúcares y harinas hasta tomar la dolorosa decisión de separarte.
Seguramente debes estar pensando todo el día en los Pro y en los Contra de todo lo que te gustaría decidir .
Se dice además, que para cualquier sueño que tengas en tu vida debes ponerle voluntad para transformarlo en algo real.
Puedes querer empezar a ser cariñoso (a), ir a un gimnasio, juntarte con tus seres queridos y tantos otros objetivos que nos proponemos todos los días.
Cualquiera sea el desafío que necesites o quieras enfrentar se necesita “Un sólo Segundo de Coraje” , para que quizás toda la vida nuestra pueda cambiar.
Es un Segundo antes de mandar un audio, antes de decir No puedo más, o no quiero hacer esto o aquello, o tal vez un Segundo para empezar a lograr esa meta que te tiene con esa sensación de algo pendiente en la vida.
Seguramente al leer esta columna te irás de inmediato a recordar cuantos segundos de coraje has tenido en tu vida, desde aquel Segundo que te llevó a formar pareja hasta tantas otras que acompañan tu historia y donde algunos deben haber estado inundados por un vértigo tremendo.
Es claro que ese Segundo no es suficiente, hay que ser capaz de mantenerlos en el tiempo si es que consideras desde el amor y no desde el miedo que vale la pena mantenerlo. En todo caso sea que lo mantengas para siempre o lo cambies por conciencia absoluta de tu ser, todo igual comienza por ese Segundo de coraje que necesitas tener.
A nivel emocional cuando uno ha vivido ese Segundo, se experimenta según lo que dice la gente en los talleres y por experiencia personal, un vértigo increíble, miedo, pero al mismo tiempo mucha paz cuando se visualiza el otro lado o costado de ese Segundo.
Algo que hemos descubierto es que cuando ese Segundo es correcto de tomar, hay silencio en el alma. Puede haber miedo, pero hay vacío de ruido en la cabeza, junto con el Segundo, hay como un suspiro que genera alivio al imaginar el cambio o el logro que se pondrá en marcha después de realizarlo.
Imagina esa llamada o esa conversación que cambiará tu vida, esa conversación que está pendiente y que necesitas hacer, esos cambios en tu vocación para empezar a hacer lo que amas, ese No, que estás que gritas y que no puedes hacerlo, o ese Si que te puede hacer latir tu corazón fuerte y sentirte vivo (a).
Te invito a revisar tus segundos de coraje, esos dados por el alma y que seguramente no te generarán arrepentimiento sino orgullo hacia ti mismo (a).
Junto con revisar esos antiguos segundos te invito a pensar en los que tienes que ejercer para empezar o terminar algo en tu vida.
Ojalá tengas el coraje de hacerlo, vencer el vértigo y escuchar ese silencio que si es correcto seguramente inundará tu alma.
Un abrazo.
Escrito por Pilar Sordo – Psicóloga
Extraído de www.pilarsordo.cl
Read more
Un par de amigos salieron a caminar para ejercitarse, tenían días sin verse y esta oportunidad sería una grata excusa para hacerlo.
En el trayecto mientras corrían el chico se resbaló y cayó, aunque no tuvo daños en su cuerpo fue tanta la ira que le produjo este momento que comenzó a golpear lo que tenía alrededor cegado por su malestar…su compañera tomó la actitud de su amigo como algo personal hacia ella y se alejaron…ese evento desencadenó una serie de toma de decisiones que perjudicó un momento para compartir y pasar un rato agradable, lo que comenzó como una experiencia motivadora, por un evento particular y la decisión tomada por ambos se convirtió en todo lo contrario…
¿Te has preguntado alguna vez sobre la importancia de nuestras decisiones cotidianas y el impacto que tienen en los resultados que obtenemos?
Por muy simple que pudiera parecer lo que te acabo de narrar, eventos como ese y su forma de abordarlos van dando pie a nuevas realidades… ¿Qué ocurriría si el joven ante su caída hubiese decidido levantarse, chequear que se encontraba en buen estado y hasta reírse de la situación? ¿Cómo habría reaccionado su amiga ante una manera más calmada de asumir la aparatosa caída?
¡Descubre tu potencial y disfruta la diferencia!
Coaching…!Vivir con maestría!
Un gran abrazo,
Mercedes Martínez
@merchylifecoach
merchylifecoach@gmail.com
Extraido de www.institutodraco.com
Read more