La palabra mágica que te unirá con tus hijos por siempre

En este camino de autoconocimiento, autoaceptación y evolución espiritual me ha tocado sanar a mi niña interior como parte del proceso, por lo que para conseguirlo tuve que cuestionar y perdonar a mis propios padres, comprender que ellos hicieron lo mejor que pudieron con las herramientas que tenían y también entender las trabas y las necesidades emocionales no cubiertas que transitaron en su infancia.

En medio de mi introspección me hicieron la pregunta: ¿qué le pediría esa niñita a sus papás que le digan que nunca le dijeron? y la única palabra que vino a mi mente fue PERDÓN. Mis padres fueron y son padres espectaculares, amorosos y presentes pero no son perfectos y muchas veces se han equivocado y me han herido, sin embargo no recuerdo que nunca me hayan dicho “lo siento, me equivoqué”.

A lo largo de mi capacitación en crianza consciente aprendí lo importante que es pedirle perdón a nuestros hijos cuando nos equivocamos. Es muy común que los papás estén dando órdenes o directivas pero es muy poco visto que un padre o una madre le pida disculpas a su hijo, quizás porque no estamos acostumbrados a hacerlo ya que nuestros padres no lo hicieron con nosotros o tal vez porque pensamos que nos desacredita o nos resta autoridad. Lo paradójico es que por más que los papás no se disculpen con sus hijos si que les exigen que ellos pidan perdón a otros niños, y eso es una ambigüedad, un mensaje confuso. 

La pregunta que varios padres me hacen es: ¿Cuándo debemos pedir disculpas? Esto es más simple de lo que parece, deberíamos hacerlo cada vez que actuamos de una forma en la que no nos gustaría que actuaran nuestros hijos. Por eso el mindfulness aquí es muy importante ya que practicar continuamente la apertura de conciencia nos permite estar alerta y percatarnos cuando estamos equivocándonos. 

Es importante que reconozcamos cómo se siente el niño o el adolescente al que hemos herido y que pongamos en palabras lo que sucedió, incluyendo los motivos por los que reaccionamos mal: “veo que estás muy asustado, me doy cuenta que te grite muy feo porque no me contestabas cuando te llamaba. Te pido una disculpa, he dormido muy poco anoche y mi cuerpo está muy cansado, descargue mi tensión contigo y eso no es justo, gritar no es la solución, me equivoqué”. 

Debemos también evitar echarle la culpa a los niños de alguna forma para justificarnos “te grite porque tu gritaste primero”. No! recuerda que nosotros somos los adultos y deberíamos tener nuestras emociones bajo control y nunca compararnos con las de un niño que recién está saliendo al mundo o un adolescente que está atravesando una crisis importante de identidad.

Pedirle perdón o disculpas a nuestros hijos cuando nos equivocamos lejos de desautorizarnos va generando en ellos respeto hacia nosotros, pero no un respeto a base del miedo sino uno que se forja al vivenciar que sus progenitores son lo suficientemente maduros y humildes como para reconocer sus equivocaciones, su humanidad. Con el ejemplo se educa.

 

Facebook: @mamaminimalista

Fuente: mamaminimalista.net

Ana_AcostaAna Acosta Rodriguez

Maestranda en Psicología Positiva Aplicada y experta en Mindfulness,  Inteligencia Emocional y Crianza con apego.

www.nutrimama.com

mamaminimalista.net/

Instagram: Nutri_mama

Si crees que este artículo puede serle útil a alguna mamá o papá, compártelo!

Read more

Carta de amor para sanar heridas emocionales

Comencemos por las reglas básicas de las que depende llevar una buena relación. Para muchos de ustedes es un conjunto de varias, sobre todo, unas más complejas que otras, pero partamos de las básicas. Ante todo, el respeto y la confianza. Qué difíciles palabras, aún más llevarlas a la realidad y convertirlas en el estandarte de toda relación.

Ahora bien, es un problema luchar contra las personalidades de cada uno, los gustos y desacuerdos. Es ahí cuando deben entrar tanto el respeto, como la confianza, para que los acuerdos trasciendan. Esto aplicado, de la mano de la constante comunicación.

¿Qué hacer cuando todo este conjunto de reglas, sumado a las que cada cual considere, falla? Pues, aunque el orgullo a veces ciegue y no lo permita, hay que ofrecer y recibir perdón. De allí parten los cambios, porque con el perdón deben venir transformaciones que demuestren resarcimiento. Entonces, el camino es reconocer, pedir perdón y, por supuesto, de errores que no se pueden volver a cometer.

“Pero… ¿Si no tengo las agallas para decírselo?” Si aún hay amor y quieres reconsiderar muchos aspectos de la relación, por eso estás acá. Entonces, ¿qué más sincero que una carta de tu puño y letra que contenga el pasado, presente y lo que será el futuro entre ustedes?

¿Cómo debes hacer esta carta?

Comienza por descargar aquello que no te gusta, que te impide continuar, que altera tu paz. Escribe eso que te molestó, que en ese momento preferiste guardarlo, pero que, ahora, es necesario él o ella lo sepa. Cómo es que pudo pasar lo que pasó, por qué sucedió, si sentiste o sientes ira, díselo.

Luego, escribe lo que esa tristeza te llevó a hacer, aunque no quisiste, pero que fuiste consciente de hacerlo. Lo que la ira generó en ti, derivó en también haber maltratado al otro y te escudaste aquella vez en una razón. Acuérdate muy bien de lo que haya pasado, para que luego tu propia conciencia no te pese.

Después, describe a qué comportamientos de esa persona les temes. Seguramente, han habido hechos que los han marcado a ambos y que han permitido se pierda la confianza. Recuerda esas palabras o esos gestos que en ningún momento esperaste recibir, pero que al fin sucedieron. Será momento de sacar a flote esas inseguridades que te generaron heridas.

Pasa ahora a reconocer tus propias responsabilidades, ya que también habrán recalcado en la otra persona y creado inseguridades en sí. Así como tú esperas que te entiendan, también debes arrepentirte por lo que hayas hecho o dejado de hacer. Reconoce que tú quisieras cosas distintas a las ya vividas, entendiendo la labor que cumplen ambos.

Ahora, firmemente plasma tus buenas nuevas intenciones dentro de la relación. Soluciones hay muchas, y habiendo dejado atrás el orgullo, debes imaginar actos para resarcir los cometidos en el pasado. Escribe qué deseas de ahora en más, qué esperas, y augura solo buenos deseos. Además, comprométete mayormente con una promesa, la cual sabes que no debes fallar y generará mayor confianza.

Haz el acto más sincero de amor…

Por último, pide perdón; no hay acto más sincero que reparar por medio de esta palabra. Estarás demostrando que quieres cambiar y sientes lo sucedido. También, demuestra ese sentimiento que siempre ha estado en ti, pero que el orgullo ha querido ocultar. Vuelve a decir “te amo” y parte de ahora en adelante desde esas palabras. Dile cuánto vale esa persona para ti y los valores que le caracterizan en su papel en la sociedad y la relación.

Read more

Los hijos Trofeo

Hay dos necesidades básicas que deben ser cubiertas cuando un niño nace y para las cuales llega preparado a este mundo para sobrevivir : una es el llanto para que mamá lo proteja del peligro y otras es el reflejo de succión para que mamá lo alimente… y yo me pregunto una y otra vez: por qué esta sociedad trata a como de lugar de ir en contra de la sabiduría milenaria de la naturaleza?

Hemos cambiado el orden natural, queremos tener hijos pero queremos seguir nuestra vida de antes, no queremos postergar nada, no queremos que nos alteren nuestras rutinas ni nuestras prioridades superficiales.

Queremos hijos trofeo. Queremos que el niño duerma solo en la cunita, se alimente solo con el biberón, que deje el pañal rápido para poder meterlo en una escuelita, que camine aún más rápido, que no llore, no “moleste”, que aprenda a hablar claro porque nos frustra no entender lo que nos pide, queremos que sea “independiente”.

Al mismo tiempo queremos que sea emocionalmente inteligente, que no nos guarde rencor y que tenga bien desarrollada su autoestima. No nos damos cuenta del nivel de incoherencia? Tan ciegos estamos?

SI al colecho, SI a la lactancia prolongada, SI al amor incondicional, NO a la violencia verbal o física, NO al método Estivill, NO a las amenazas, NO a los hijos trofeo.

LA CRIANZA CONSCIENTE no nos hace bichos raros, nos devuelve la humanidad.

Facebook: @mamaminimalista

Fuente: mamaminimalista.net

Ana_AcostaAna Acosta Rodriguez

Maestranda en Psicología Positiva Aplicada y experta en Mindfulness,  Inteligencia Emocional y Crianza con apego.

www.nutrimama.com

mamaminimalista.net/

Instagram: Nutri_mama

Si crees que este artículo puede serle útil a alguna mamá o papá, compártelo!

 

Read more

¿Enamorado?

A todos alguna vez nos ha tocado prender el carbón para la parrilla y todos hemos usado algún artefacto para tirar aire (o incluso soplado con la boca) para que el carbón prenda más rápido. ¿Curioso no? Que el fuego necesite aire para prender. Ese mismo aire es el que se necesita en las relaciones de pareja para mantener el deseo vivo, sobre todo si son de larga data.

Si hay una pregunta que se repite una y otra vez en mi cuenta de Instagram @hoymetoca es respecto del deseo sexual. Debo decir que siempre son mujeres las que escriben pero no puedo dejar de lado a los hombres, ya que en la consulta es donde veo el sufrimiento de ellos.

Inevitablemente cuando baja el deseo sexual las personas se preguntan si siguen enamoradas o si tal vez ya se acabó el amor. Y aquí viene una pregunta que pocas veces podremos responder con certeza, ya que el enamoramiento está tan idealizado, por lo intenso que se viven los primeros encuentros, que existe un anhelo por volver a sentir esas mariposas en el estómago y cuando ya no las sentimos creemos que se fue el amor.

Sabían ustedes que el estado del enamoramiento ha sido objeto de estudio para muchos científicos y todos concluyen que dura entre 8 meses y 4 años máximo. Incluso han llegado a sugerir que cuando uno se encuentra en este estado no tome decisiones importantes, ya que el cerebro actúa muy parecido a como si estuviera bajo los efectos de una droga tan fuerte como la cocaína, por lo tanto el razonamiento se ve afectado y por ende se toman malas decisiones.

Esa euforia, esa idealización del otro, esa incapacidad por integrar los aspectos malos y buenos, ese relajo con el que se ven el resto de los problemas (si es que se ven) son parte de esta droga llamada amor, probablemente la más pura y sana, pero droga al fin y al cabo. No te permite ver thebigpicture, simplemente danzas al ritmo de las hormonas que viven dentro de tu cuerpo como si todos los días fuera año nuevo.

Este estado, muy perseguido y anhelado por todos es una crónica de una muerte anunciada. Todos quienes lo hayan sentido alguna vez saben que va a caer, probablemente lo único que no se sabe es cuándo va a pasar esto, pero lo importante es saber que va a pasar y que cuando aparezca la realidad (porque el resto es un cuento de Disney) necesitamos herramientas para afrontarla y no salir arrancando, buscando un nuevo paisaje donde vuelen mariposas. La gracia está en poder ver el mismo paisaje con distintos ojos.

Aquí viene la gran misión que desde mi punto de vista tiene como objetivo número uno agradecer el tiempo de las mariposas y aceptar que probablemente esa intensidad y ese nivel de sensaciones y deseo por el otro jamás volverán a aparecer tan fuerte con la misma persona, lo que no quiere decir que van a desaparecer por completo. A mí me gusta pensar que es como la nieve, sabemos que eventualmente va a caer nieve, esperamos una época del año donde se asume que va a llover y nos preparamos para ver nuestras majestuosas y blancas montañas. Del mismo modo, sabemos que no tenemos nieve los 12 meses del año, y eso no nos hace salir arrancando a ninguna parte, simplemente guardamos nuestros equipos y esperamos pacientemente la próxima temporada.

Estar en pareja es poder construir y reconstruir permanentemente la relación, como cuando uno tiene una casa, nunca paras de decorar y redecorar los espacios, remodelar, ampliar cambiar tapices, etc. Véanlo así, ustedes son un hogar que tiene que estar cómodo para todos. Nadie quiere sentarse en el mismo sillón toda la vida. No le teman a los cambios, no le tengan miedo a decir lo que no me gusta del otro (con amor) y reciban con los brazos abiertos las inquietudes del otro.

Es por esto que siempre incito las conversaciones entre las parejas, conversaciones reales no de asuntos domésticos ni administrativos del hogar. A través de tareas y ejercicios que les mando para la casa logramos crear un espacio distinto de intimidad y cercanía que con el tiempo se había perdido por los motivos que sean. Poder atreverse a conversar de algo nuevo que los va a beneficiar a ambos, poder hacer cosas distintas, verse mutuamente desde otro lugar que no sea el de madre/padre sino que el de dos humanos necesitados de contacto físico y emocional, muchas veces hambrientos sexualmente.

 

Michelle_PollmannMichelle Pollmann Román

Directora de Centro Al Alma

Psicóloga Clínica
Postítulo Psicoterapia Psicoanalítica
Terapeuta de Pareja
Sexóloga en formación

 

Foto portada: Photo by Adam Kontor from Pexels

 

Read more

PREDICA CON EL EJEMPLO

A veces me pregunto si estaremos haciendo bien al ir contra la corriente, sin castigos ni presiones, apostando al desarrollo de la inteligencia emocional, de la toma de decisiones conscientes, resiliencia, empatía.

Como toda mamá, me cuestiono, me hago preguntas. Luego veo a mi hijo tratando a un perro que recién conoce con tanto amor, empatía, respeto. Y veo a mi hija de 21 meses caminando por el puerto ofreciéndole su comida a la gente que pasa y me maravillo.

Pero cuando analizo caigo en la cuenta de que, minutos antes, yo les lleve a unos abuelos que estaban sentados cerca nuestro unos bizcochos que había comprado. Me doy cuenta que más allá de los detalles cotidianos, los encuentros, desencuentros, confusiones y a veces los conflictos, nuestros hijos nos ven y nos tienen como parámetro.

Hoy más que nunca, mamá o papá, trabaja en ti mismo, en tu ego, en tu paciencia, en tu tolerancia con los demás, porque tus hijos te están viendo.

Si tu hijo responde con amor, empatía, generosidad, tolerancia, date una palmada en la espalda: lo estás haciendo bien.

Pero también observa cómo maneja sus emociones y pregúntate: ¿cómo reaccionas con las tuyas?, ¿Atacas o discutes fuerte con tu pareja delante de tus hijos?, ¿Gritas cuando estás enojada?, ¿insultas a otras personas en su presencia?, ¿te burlas de otros?, ¿criticas a los demás mientras tus hijos escuchan? Si lo haces, no te castigues pero toma consciencia, aun no es tarde.

Facebook: @mamaminimalista

Fuente: mamaminimalista.net

Ana_AcostaAna Acosta Rodriguez

Maestranda en Psicología Positiva Aplicada y experta en Mindfulness,  Inteligencia Emocional y Crianza con apego.

www.nutrimama.com

mamaminimalista.net/

Instagram: Nutri_mama

Si crees que este artículo puede serle útil a alguna mamá o papá, compártelo!

Read more

De la Observación a la Salud Radiante

En esta oportunidad la intención es invitarte a que mires dentro de ti, y observar que patrones de pensamientos  sostienes, las emociones que surgen mente-cuerpo, atenderlas   justo en el instante en que ocurren a través de la observación del Instante presente.

El acto de observación del instante presente permite liberarte de estados de pensamientos adictivos nocivos para la salud, psico-emocional y fisico, porque te estás prestando atención, estás siendo consciente del momento, estás siendo consciente de ti mismo, como resultado el pensamiento y la emoción se disolverán, pasando a ser insignificante y se tiene la  opción de experimentar una nueva realidad más creativa, ver soluciones y punto de vistas que antes estaban nublados por la identificación que ocurre como acto inconsciente de acuerdo al momento que se esté experimentando, que al asignarle una connotación que no sea positiva para la vida de quien lo experimenta surgirán pensamientos que le den consistencia a que permanezca en el tiempo y creen una realidad en la vida de quien los piensa que no son óptimas para mantener la salud en un estado deseable, ya que la mente-cuerpo ha de enviar mensajes y aparecerán la emociones que engloba el miedo, al no ser reconocidas, integradas y trascendidas generan  como inicio un estado de  estrés

El acto de observarte te da la oportunidad de estar más presente en tu vida dia a dia, (en el único tiempo que existe, el ahora) significa que ya no se tiene que acumular más dolor, el cual genera sufrimiento por no haber sido atendido en el momento en el que surgió, y estará allí y se mostrará hasta que se tenga un instante de consciencia de su existencia. Al ser trascendido ya no se tendrá que pasar por ese pensamiento-emoción, situación,  una y otra vez, ahora se comprende la emoción, habrán surgido otros sentimientos.

Es así que el acto de la observación por sí mismo te devuelve a un estado de equilibrio, donde el acto de reconocerte surge la oxigenación del cuerpo y la disipación de los pensamientos dejando a la mente en una especie de vacío, calma y quietud recuperando la estabilidad emocional, porque las mitocondrias del cuerpo producirán serotonina (el bien llamado el neuro trasmisor de la felicidad) y es allí donde las células y el sistema inmunológico se alinean para dar luz al cuerpo y el equilibrio perfecto.

Ahora desde ese centro de equilibrio,  desde ese instante presente donde la paz se vuelve aditiva, podrás crear nuevas ideas, nuevas experiencias y diferentes aventuras, a través de sueños y programaciones conscientes que le darán un tinte diferente a tu vida  y por ende una salud radiante, porque estarás creando desde un nivel de conciencia más elevado.

Licda, Marisabel Rodriguez. 

CEO Centro de Integración y Trascendencia

https://www.facebook.com/reconoceintegraytrasciende

Extraido de Instituto Draco

Read more

Cómo elogiar a nuestros hijos pequeños para reforzar su autoestima

No hay orgullo más grande que ver a nuestros hijos dominando habilidades: los primeros pasos, las primeras palabras, el primer partido de fútbol o recital de ballet y hasta la primera vez que se sientan solitos son momentos épicos y los celebramos con euforia. El orgullo rebasa nuestro pecho y es normal sentirse así.

Pero muchas veces nos encontramos todo el tiempo alabando o aplaudiendo cosas que nuestros hijos ya han dominado hace tiempo o quizás lo hacemos exagerando sus logros y debo decirles que los niños son muy vivos y se dan cuenta cuando no somos del todo sinceros con nuestras alabanzas y aunque creamos que enaltecer es siempre positivo hay momentos y formas en las que pasa todo lo contrario.

Por supuesto que una familia amorosa que alienta a sus hijos usando determinados tipos de elogios logrará efectos positivos en su persistencia, resiliencia y felicidad. Así lo sugieren los hallazgos del estudio realizado por Morris and Zentall (2014).

Una de las hipótesis de este experimento era que cuando los cumplidos eran ambiguos o solo gestuales los efectos no eran tan beneficiosos que cuando la alabanza incluía una propiedad o característica particular (por ejemplo: “muy bien” versus “lo lograste porque eres inteligente”) pero su conclusión fue que en realidad los elogios ambiguos o gestuales eran igual de efectivos que los que incluían una característica específicas e inclusive los niños sentían menos presión parental.

Es más, observaron que los elogios gestuales (como el famoso dedo pulgar hacia arriba) proporcionaban beneficios positivos únicos en la autoevaluación de los niños. Algo que sorprendió a los investigadores fue que cuando un niño atribuye su éxito a rasgos específicos, como la inteligencia, y luego experimenta fallas, es menos probable que persista porque el fracaso amenaza la creencia de que él / ella es inteligente.

9B0F8755-B50F-4AA9-AA3F-9E47CF36761BPor otro lado, mientras determinados tipos de elogios son aliados en el desarrollo de la inteligencia emocional y de la motivación otros pueden afectar la autoestima de nuestros hijos. Así concluyeron en su investigación Brummelman y colaboradores (2017) quienes observaron que, dependiendo de las circunstancias, los elogios pueden dañar la autoestima de los niños o servir como combustible en el desarrollo del narcisismo.

Por eso, a la hora de hacerles un cumplido para motivarlos, podemos seguir los lineamientos sugeridos por Jennifer Henderlong Corpus y Mark Lepper, psicólogos de renombre que analizaron los datos obtenidos en más de 30 años de estudios sobre los efectos de los elogios (Henderlong & Lepper 2002). Un artículo en inglés que leí hace un tiempo supo resumir estas directrices de una manera fenomenal y se las comparto (un poco adaptadas):

  • Ser específicos y muy sinceros a la hora de elogiar el desempeño de nuestros hijos.
  • Alabarlos solo sobre atributos o características que ellos tienen el poder de cambiar o mejorar.
  • Utilizar palabras que describan estándares realistas y alcanzables.
  • No excedernos al elogiar logros que se consiguen muy fácilmente
  • No abusar de las adulaciones a los hijos cuando estos se deban a alguna actividad que los niños amen hacer.
  • El enfoque debe ser el de motivar a nuestros retoños a dominar habilidades, no en compararse con otros niños.

Esto requiere práctica y toma tiempo, lo sé por experiencia propia, y es debido a que los cumplidos nacen espontáneamente de nosotros.

35085891-DF9C-4AA5-895A-FCB8664B0B05Yo puedo adicionar, en función a lo que he aprendido en mis cursos, mis lecturas de investigaciones y mi experiencia personal, que más allá de estos hallazgos es fundamental transmitirles a nuestros hijos que:

  • Los fracasos no determinan quiénes somos y son parte de la vida.
  • Nuestro amor para con ellos NO se determina en función de sus logros o su belleza, es incondicional y no deben hacer nada excepcional para ser merecedores del mismo.

El amor nunca está de más, como tampoco está de más tratar de utilizar todas las herramientas disponibles para hacer el mejor trabajo en la crianza dentro de nuestras posibilidades.

Facebook: @mamaminimalista

Fuente: mamaminimalista.net

Ana_AcostaAna Acosta Rodriguez

Maestranda en Psicología Positiva Aplicada y experta en Mindfulness,  Inteligencia Emocional y Crianza con apego.

www.nutrimama.com

mamaminimalista.net/

Instagram: Nutri_mama

Si crees que este artículo puede serle útil a alguna mamá o papá, compártelo!

Read more

Sentir y Ver

Mi reflexión del último tiempo se ha centrado en nuestra capacidad de sentir y ver las cosas que nos rodean. Nuestra biología e historia predeterminan como la veremos, como la viviremos y cuánto la disfrutaremos. Acá dejamos clara la primera parte, mi forma de ver la vida.

La segunda parte y más que fundamental es que no estamos solos en el mundo. Vivimos con otros y nuestra capacidad de ver y conocer el mundo de los demás ni siquiera lo dimensionamos. Asumimos muchas veces que los demás ven el mundo semejante o igual a como yo lo veo y les tengo una noticia!!! Existen tantos mundos y formas de ver la vida como personas hay en la tierra.  Bienvenido al mundo de las diferencias, bienvenido al mundo del yo y del otro, la invitación es a dejarse sorprender y dedíquese a conocer a través de las conversaciones!!!!

La única forma de poder comenzar a entender a otros es teniendo conversaciones. Estas conversaciones deben estar llenas de preguntas. Comenzar preguntando respecto a un fragmento de realidad específico y concreto puede ser un ejercicio extraordinario. Qué ve, qué siente, a qué le recuerda y cómo vive ese momento. Una acción concreta a evaluar puede ser por ejemplo dar un abrazo, observar un cuadro, degustar una comida, mirarse al espejo y miles más. Es cosa de elegir una, observarla y someterla a interrogatorio. Es un ejercicio tremendo, sorprendente y de inagotable aprendizaje. Cada mundo personal es único y ayuda a abrir miradas, entender las diferentes reacciones de los demás y aceptar las diferentes formas para mirar el mundo. Todo esto viene cargado con nuestra historia, nuestra seguridad en nosotros, nuestro amor, el propio y el recibido.  Toda experiencia nueva, evoca nuestro aprendizaje anterior y lo predetermina o tiñe de cierta forma. Lo mágico de hablar de nuestra experiencia y vivencia,  es que compartiéndola con un otro podemos entender que no existe sólo una o solo la mía, existen muchas y yo puedo sumar nuevas formas de ver que me hagan sentir mejor y vivir más feliz.

 

 

florencia_vargasFlorencia Vargas Schmauk

Conoce más de Florencia AQUI

Psicóloga U Andes

 

 

Foto portada: Photo by Jodie DS from Pexels

Read more

Aumenta las preguntas

Hace mucho tiempo unos mayas me enseñaron algo que he intentado practicar y que no es nada fácil.

Ellos me preguntaron ¿cuántas preguntas te haces al día?. Al ver mi cara de sorpresa era evidente que no me hacia o me hacia muy pocas. Me empecé a preguntar porque no me preguntaba y lo que apareció era obvio, me daban miedos las respuestas. Tendría que hacerme cargo de ellas y probablemente hacer cambios y tomar decisiones.

Cuando llevé este aprendizaje a talleres me di cuenta que no estaba sola en este problema y que a todos o casi todos nos pasaba lo mismo.

Cuando me refiero a preguntas, quiero decir cuantas veces en el día, te preguntas , ¿cómo estás?, o ¿ cómo está tu vida?, ¿cómo te sientes? Y tantas otras que pueden venir a tu cabeza.

Es verdad que al sistema económico que tenemos no le conviene gente pensante o que se pregunte muchas cosas, así consumimos más y somos más “dóciles” al momento de actuar. Quizás por eso hemos ido eliminando la filosofía de las aulas y de las calles, lo cual sólo me asusta y no me gusta.

Las preguntas que nos hacemos son nuestro pequeño espacio de libertad que nos permite poder elegir y sobre todo hacernos cargo de todo lo que nos está pasando.

Las preguntas ayudan a que no nos mintamos, a que seamos capaces de ver nuestras luces y nuestras oscuridades todo el tiempo y podamos actuar en consecuencia.

Quiero invitarte a hacerte preguntas desde que te despiertas hasta que te acuestes, no para que puedas elegir, seguramente hay muchas de ellas en que la respuesta será obvia y no podrás elegir pero el solo ejercicio de practicarlas te hará sentir distinto frente a todo, incluso frente aquello que tendrás que hacer igual o en aquellas donde la respuesta será evidente.

El solo ejercicio te sorprenderá porque habrán muchas respuestas que las dará tu cuerpo y tus emociones sin poder controlarlas desde tu cabeza, simplemente ocurrirán.

Es como cuando tiembla o es Año Nuevo donde tu cabeza se va a personas que no imaginaste o que  te  ratifican  que  son  las  importantes  de  tu vida.

Te harás preguntas como si quieres hacer regalos de navidad en noviembre, o si tu hijo(a) necesita otro par de jeans o tal vez si es necesario o si quieres comer ese pie que sabes que te engorda. Tal vez serán más importantes como si eres no feliz, si estás en paz, si te sientes bien o orgullosa (o) de ti mismo(a).

Te advierto con cariño que el ejercicio de hacer más y más preguntas requiere de una condición y esta es la valentía, para poder aceptar las respuestas y hacerte cargo de ella. No es tarea nada fácil ni cómoda pero te aseguro que es muy satisfactorio el ejercicio de ser congruente con uno mismo y actuar desde el corazón todo el tiempo.

También da miedo empezar a practicarlo todo el día, pero es solo al principio. Pasa algo hermoso que, es que después de ver, no es nada cómodo volver a hacerte el tonto(a) haciéndote el ciego(a) de nuevo.

Parece ser un aprendizaje que no tiene retorno. Buena suerte, ojalá lo practiques con todo, yo al menos estoy en eso.

 

pilar_sordoEscrito por Pilar Sordo – Psicóloga

Extraído de www.pilarsordo.cl

 

 

 

Read more

La pareja emocionalmente ecológica

Ecología emocional y relaciones

Formamos parte de un ecosistema físico resultado de la interacción de todos los sistemas mentales y emocionales que lo constituyen. Somos parte de un gran todo y, en este momento de la historia de la humanidad, ya padecemos mayor contaminación emocional que atmosférica.

Los grandes principios de la ecología del medio ambiente pueden ser aplicables a la gestión de nuestro mundo emocional y facilitan su comprensión. Así hablamos de energías emocionalmente ecológicas, reciclar emociones, clima emocional global, lluvia ácida, basuras emocionales, contagio emocional, contaminación emocional, desertización, vitaminas emocionales, espacios protegidos… La Ecología Emocional ofrece estrategias concretas para mejorar nuestra vida.

Definimos “Ecología Emocional” o Psico-eco-afectividad como el arte de gestionar nuestros afectos canalizando y dirigiendo creativa y amorosamente su energía para construir una vida más armónica y sostenible. Es un trabajo en equipo mente-emoción. El concepto “eco” hace referencia a la importancia de que ambas vertientes trabajen integradas para que nos muevan a efectuar acciones de mejora en nuestra persona y en los sistemas humanos y sociales en los que estamos inmersos. Incluye dos valores esenciales: la responsabilidad y la conciencia del impacto emocional global.

La gestión emocionalmente ecológica de nuestras emociones

Generamos basuras a diario. Imaginad que cada día cogemos las bolsas llenas de desechos, las atamos, las apilamos en una habitación de casa y cerramos la puerta. Así día tras día. ¿Qué ocurriría? Empezaría a oler mal toda la casa y llegaría un momento en que la vida allí sería imposible para nosotros y para nuestros vecinos.

Todos sabemos cuál es la conducta adecuada: llevar a diario nuestras basuras al contenedor más próximo para que sean recogidas, recicladas, quemadas o reutilizadas. Puro sentido común. Pero, ¿hacemos lo mismo con nuestras emociones? No siempre. Las escondemos, las apilamos, dejamos que “se pudran” y, al retenerlas permitimos que contaminen nuestro interior. Por eso es preciso reciclar o eliminar diariamente nuestras “basuras emocionales”. Como decía Gandhi:

Si cada día nos arreglamos el cabello… ¿por qué no hacemos lo mismo con el corazón?”

Diferenciar las emociones que se pueden reciclar de las que son altamente tóxicas es un arte que forma parte de las competencias que la ecología emocional desarrolla. Uno de los muchos aspectos de la gestión emocionalmente ecológica de nuestras emociones consiste en aplicar las 4R de la sostenibilidad al territorio emocional. Reducir la emanación de tóxicos emocionales, Reciclar lo que sea reciclable (por ejemplo podemos convertir la ira en fuerza para encajar una adversidad, los celos en desprendimiento, la envidia en superación personal…). Reparar las heridas emocionales y las ofensas y Reutilizar nuestras capacidades dormidas.

La gestión de la energía emocional

Crisis climática, destrucción de los medios tradicionales de subsistencia, agotamiento de recursos…Estos retos del medio ambiente pueden extrapolarse al mundo emocional. ¿Qué clima emocional respiramos? ¿Cómo gestionamos nuestros recursos? Podemos conectarnos a fuentes de energía sostenibles, limpias y renovables o bien a fuentes emocionales insostenibles y contaminantes; canalizar correctamente nuestra energía y dirigirla a los objetivos que realmente queremos o bien perderla por el camino, invertirla incorrectamente y derrocharla sin ton ni son.

Ahí reside la explicación de por qué no conseguimos los objetivos deseados y por qué, a veces, nos sentimos cansados, desanimados y sin fuerzas para perseverar; sin ánimo para luchar por nuestros proyectos, sin ilusión para vivir nuestro día. La ecología emocional nos ayuda a comprender mejor que nos ocurre y a reconectarnos a fuentes emocionalmente sostenibles, renovables y ecológicas que nos permitan mantener un buen nivel de energía.

Fuentes de energía: de donde parte la energía que nos mueve a la acción

  • INSOSTENIBLE: coacción, obligación, necesidad imperiosa, prisas, deuda, culpa, resignación, venganza.
  • SOSTENIBLE: amor, alegría, compasión, cariño, gratitud, ternura, solidaridad, generosidad.
Esto te puede interesar:   4 pruebas científicas de que enamorarnos nos vuelve «casi locos ”

Canalización: Cómo la orientamos, qué límites la sostienen

  • INSOSTENIBLE: fugas de energía: quejas, excusas, victimismo; fragilidad en la contención de la energía; direccionamiento inadecuado; intención sin acción coherente.
  • SOSTENIBLE: fuerza de voluntad, decisión, valentía, autoestima, espíritu crítico, disciplina, esfuerzo, perseverancia, atención, concentración.

Cómo nos relacionamos con la energía y donde la invertimos:

  • INSOSTENIBLE: avidez, retención, infrautilización, mezquindad; derroche, despilfarro; apostar por la seguridad; querer cambiar a otros; la rapidez como valor; seducir en lugar de educar; mantener las ofensas; vocerío mental.
  • SOSTENIBLE: solidaridad energética, compartir, colaborar, dejar fluir, aplicar las R: reciclar, reutilizar, reducir, restaurar, reparar; educar, desprendernos, autogestionar.

Flujo, renovación, intercambio:

  • INSOSTENIBLE: dirección única – dar sin recibir -; agotamiento del sistema por colapso del mismo; negación a aprender, egoísmo.
  • SOSTENIBLE: generosidad con nosotros mismos, con los demás y con el mundo tanto en el sentido de saber dar como de permitirnos recibir.

Una relación de pareja emocionalmente ecológica

La pareja emocionalmente ecológica es la formada por dos personas autónomas, independientes y enteras que se eligen en libertad y responsabilidad y que están dispuestas a trabajar en su proyecto individual a la vez que a construir un proyecto conjunto. Aportamos a la pareja lo que cada uno somos + nuestro potencial de mejora + el trabajo amoroso que estamos dispuestos a realizar. Para encontrar al otro, debemos estar abiertos a nuestra propia realidad.

El principio esencial para la convivencia armónica y construcción del buen amor parte de dos personas autónomas, independientes y enteras que se eligen en libertad y con responsabilidad. El primer reto es el propio crecimiento y mejora individual ya que será la base para éxito de los pasos siguientes. Si queremos compartir un camino es preciso tener “un camino para compartir”.

Elegir bien es clave, porque la compatibilidad de los valores y proyectos individuales de vida y la posibilidad de construir algo juntos condicionará el éxito de la relación.

Hay parejas que no tienen “proyectos amorosos”, solo pactos de primera necesidad y sabemos que una persona se convierte en la víctima de las víctimas cuando su necesidad de ser amada eclipsa a su necesidad de ser respetada. Una relación de pareja solo se justifica cuando es un espacio de crecimiento individual y conjunto. De no ser así, mejor solos.

Las 7 leyes de la gestión ecológica de las relaciones de pareja

  1. Ley de la autonomía: Ayúdate a ti mismo y tu pareja te ayudará.
  2. Ley de la prevención de dependencias: No hagas por tu pareja aquello que ella pueda hacer por sí misma.
  3. Ley del boomerang: Todo lo que haces a tu pareja, también te lo haces a ti mismo.
  4. Ley del reconocimiento de la individualidad y la diferencia: No hagas a tu pareja aquello que quieres para ti, puede tener gustos diferentes.
  5.  Ley de la moralidad natural: No hagas a tu pareja aquello que no quieres que te haga a ti.
  6. Ley de la autoaplicación previa: No podrás hacer ni dar a tu pareja aquello que no eres capaz de hacer ni de darte a ti mismo.
  7. Ley de la limpieza relacional: Tenemos el deber de hacer limpieza de las relaciones de pareja que son ficticias, insanas y que no nos permiten crecer como personas.
Por Mercè Conangla y Jaume Soler
Fundació Àmbit Ecologia Emocional
@EcoEmocional
Read more